24 oct. 2025

Alertan que el segundo lago más grande de Bolivia se convierte en un desierto

El segundo lago más grande de Bolivia, el Poopó, está en un proceso de desertización en la zona andina del país debido al cambio climático, los fenómenos de El Niño y la Niña y la contaminación minera.

lago bolivia.jpg

Foto: c2.staticflickr.com

EFE

El ingeniero agrónomo Milton Pérez, de la Universidad Técnica de Oruro (UTO), y el dirigente campesino Valerio Rojas, afirmaron a Efe que durante una inspección realizada el viernes al lugar se ha comprobado que el Poopó hoy “es un lago sin vida”.

El Poopó está situado en el departamento andino de Oruro y se considera como el segundo más grande de Bolivia, después del Titicaca, que está compartido con el Perú.

“El monitoreo aplicado al Poopó ha establecido que hoy está casi seco”, dijo Pérez, que ha investigado el comportamiento del lago.

Según Pérez, se trata de un ecosistema muy frágil, que tiene una profundidad muy baja, de 1,5 a 4 metros, y que ha sufrido la reducción de sus aguas debido a varios fenómenos climáticos.

Entre las causas están el aumento de la temperatura por el cambio climático y de la frecuencia de los fenómenos de El Niño y La Niña, que en el altiplano se sienten cada dos o tres años, a diferencia de antes cuando era cada siete o diez.

El Poopó tenía seis o siete años de una dinámica de equilibrio, “pero ahora no se le da al lago, de manera natural, el tiempo suficiente para restablecerse como el ecosistema que era”, agregó.

El diario orureño La Patria informó de que tras un sobrevuelo del lugar se comprobó que “se convirtió en una inmensa zona desértica, donde no existe indicios de agua, solo arcilla resquebrajada”.

Según el matutino, el espejo de agua del lago llegó a tener una superficie de más de 4.600 kilómetros cuadrados, pero actualmente hay muy poca agua ocupando el lugar

El Titicaca, situado a 3.800 metros de altitud y que pertenece a Bolivia y Perú, tiene una superficie de 8.000 kilómetros cuadrados.

El dirigente campesino de esa zona Valerio Rojas destacó, en declaraciones a Efe, que desde hace un año se veía la reducción de las aguas hasta que el Poopó se convirtió hoy “en un lago sin vida”.

Rojas es la autoridad indígena del Untavi, del municipio de Toledo, donde vive la población afectada por esa situación.

Dijo que históricamente el lago ha sufrido en diferentes épocas reducciones drásticas de las aguas, pero también su recuperación.

No obstante, ahora los campesinos creen que las aguas no serán recuperadas por el aumento de las temperaturas en el altiplano.

“Tenemos un lago que ha desaparecido, ahora es una pampa, es un desierto donde no se puede sembrar nada, ni producir, ni hay nada, mucho menos vida”, sostuvo al lamentar las pérdidas para centenares de campesinos y pescadores que abandonan el lugar.

Más contenido de esta sección
Estados Unidos anunció este viernes sanciones financieras contra el presidente colombiano Gustavo Petro por no combatir el narcotráfico, y recibió una fuerte respuesta del mandatario, que prometió que no dará “ni un paso atrás”.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso este viernes sanciones financieras al presidente de Colombia, Gustavo Petro, a quien el mandatario estadounidense, Donald Trump, acusó de ser un “líder del narcotráfico”.
Un broche de diamantes que perteneció a Napoleón Bonaparte, pero que fue confiscado por el ejército prusiano cuando el emperador francés huyó derrotado de la batalla de Waterloo será una de las estrellas de la subasta de joyas que Sotheby’s celebrará el 12 de noviembre en Ginebra.
El papa León XIV advirtió este viernes sobre “las tendencias, en muchas regiones del mundo, a no apreciar o incluso rechazar el matrimonio” y pidió promover políticas de apoyo a la familia durante una audiencia en el Vaticano.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusó este jueves a Estados Unidos de ejercer a diario una “guerra psicológica” sobre su país.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, negó este jueves las informaciones de prensa de que habría enviado bombarderos B-1 cerca de Venezuela como parte de su estrategia de combate al narcotráfico.