02 jun. 2024

Agua servida destruye el asfalto y contamina los recursos hídricos

Son incontables las calles que se encuentran con pozos de agua servida a causa de los negocios y lavaderos. Los propietarios se exponen a millonarias multas de entre 20 y 2.700 jornales.

El problema de las aguas servidas se presenta en la mayoría de las calles de la capital y el Departamento Central del país, lo cual es una problemática constante para el deterioro de los asfaltos, sumado a los altos químicos residuales de los lavaderos clandestinos de autos que contaminan el suelo y los cauces hídricos.

A esta inconsciencia de los ciudadanos ahora se suman los lavamanos de los negocios que no cuentan con un sistema de desagüe, lo cual es considerado una falta gravísima que afecta al medioambiente.

El agua acumulada destruye el pavimento. “No hay asfalto que aguante al agua circulando por encima de la calle, el agua debe ser introducida en tubos o galerías subterráneas”, afirma el ingeniero Hermann Pankow.

Arrojar agua a las calles constituye una falta gravísima contra el medioambiente que tiene una multa desde 20 jornales mínimos, lo que equivale a unos G. 16.868.140 y a 2.700 jornales como máximo, lo que sería un total de G. 227.718.000, dependiendo de la gravedad del caso, según lo que dictamine el Juzgado de Faltas de la Comuna capitalina.

El director de Recursos Hídricos del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), David Fariña, indicó que es una situación coyuntural de emergencia y que aquellos negocios que arrojan agua con residuos químicos corren riesgo de ser sancionados con altas multas.

“Hay un impacto ambiental porque utilizamos jabones, detergentes y eso llega al suelo. Los detergentes que contienen fósforo están prohibidos. Con la situación de emergencia todos los negocios implementaron lavamanos en todas partes y luego el agua llega a las calles y deriva al desagüe pluvial y deteriora los asfaltos”, señaló.

contaminación. “Los productos químicos que se arrojan con el agua de los lavamanos, lavaderos de autos o de las casas sin una planta de tratamiento o desagüe, generan inconvenientes, como ir aumentando la cantidad de fósforo en los recursos hídricos, normalmente los jabones y detergentes contienen ese químico y contaminan”.

Mencionó que los lavaderos de autos requieren de un sistema de tratamiento de las aguas residuales, desagüe y un estudio previo por el Mades. “Ahí tenemos agua con fósforo, aceites, agua con combustible, tiene que pasar por una planta de tratamiento previo y posteriormente ser vertido en el desagüe. Los lavaderos requieren un estudio de impacto ambiental aprobado por el Mades, este estudio debe proveer cuál es su sistema de tratamiento de aguas residuales”, sostuvo.

En el caso de los lavatorios de manos indicó que los propietarios deben juntar el agua y derivarla a un sistema de pozo ciego o al sistema de alcantarillado sanitario.

“Esto es un tema de la Municipalidad porque es un tema individual por cada establecimiento. Los municipios deben ejercer control en estos locales”, puntualizó.