La Dirección Nacional de Aduanas (DNA) mostró las capturas de pantalla del sistema digital que registran el pago de G. 610 millones, que realizó la empresa Emeku Sociedad Anónima por las mercaderías que quedaron tras el robo del depósito de Gical.
En el citado depósito estaba la totalidad de la carga de electrónicos declarados de contrabando luego de un sumario y tenían una valoración de G. 18.800 millones. En agosto del año pasado, cinco personas ingresaron al lugar y se llevaron los productos más costosos por valor de G. 16.000 millones. Pese a la denuncia y urgimiento que hizo Aduanas, la Fiscalía no investigó el hecho.
La denuncia que pesa actualmente en contra del titular de la DNA, Julio Fernández, y la administradora de Aduanas de Paksa, Guadalupe Ruiz, por supuesta lesión de confianza presentada por el senador colorado Martín Arévalo, señala que dicha carga fue robada y el restante fue a parar en poder de dicha firma de manera irregular.
En conversación con ÚH, Ruiz apuntó que los documentos que exhiben son comprobantes legales del pago del despacho por G. 610 millones de Emeku, en concepto de despacho. Dijo que es lo que debía pagar por el valor de G. 2.800 millones de la mercadería.
Explicó que la DNA realizó un concurso de precios como establece la ley y se presentaron tres ofertas, de las cuales fue Emeku la más alta, es decir, la que presentó el monto total del despacho por las mercaderías. “Solo esta firma presentó la oferta para pagar los G. 610 millones. De lo contrario, declarábamos desierto el concurso”, afirmó.
Subrayó que esto demuestra que Aduanas cuenta con toda la documentación de respaldo de la legalidad con que se actuó en el caso de esta carga declarada de contrabando.