Antes de ser inhumado en horas de la noche en el camposanto privado Parque Jardín Bella Vista, el cuerpo y la memoria de Maradona recibieron el tributo de miles de hinchas y de ex compañeros, durante las horas que duró el velatorio que tuvo lugar en la Casa Rosada, sede del Gobierno argentino.
Desde sus antiguos condiscípulos infantiles de los Cebollitas, pasando por el actual técnico de River Plate, Marcelo Gallardo, hasta sus compañeros campeones en México 86, el desfile apesadumbrado de nombres importantes del fútbol del fútbol del vecino país fue incesante en Casa Rosada.
Sin embargo, la emocionada jornada no estuvo exenta de incidentes. A pesar de que se anunció que el velorio sería extendido por tres horas para permitir que más gente despida a Maradona, el mismo culminó una hora y media antes de lo previsto. La policía reprimió con balas de goma y gases lacrimógenos a grupos de personas que no quisieron abandonar el lugar.
Más tarde, otras tantas miles de personas saludaron con aclamaciones el paso del cortejo que trasladó el féretro hasta el cementerio, última morada del Diez.
En Nápoles
Las afueras del estadio San Paolo, que ya el miércoles se ha confirmado pasará a llamarse Diego Armando Maradona, se convirtieron en un santuario dedicado al ex futbolista argentino, mientras dentro en Nápoli jugaba por la Europa League. Entre los cientos de hinchas que desfilaron resaltó Rosario, poeta napolitano de 77 años que vive frente al recinto deportivo. “Escucha esta voz que canta, es nuestro corazón. Nos has hecho vencer y nosotros te guardamos en nuestro corazón”, cantó el vate ante los aplausos conmovidos de los napolitanos, según AFP.