Son múltiples las actividades que pueden hacer los niños pequeños desde sus casas, entre ellas el quehacer diario del hogar, según recomiendan los profesionales. Es recomendable porque a través de aquellas que se le vaya indicando los niños van aprendiendo el sentido de la colaboración en el hogar, del trabajo en equipo, de la responsabilidad y a su vez van desarrollando autonomía y seguridad.
Para la sicóloga María José Rodríguez la edad recomendable para que los niños inicien esas actividades son entre los 2 y 3 años de edad, dependiendo de su grado de madurez y del desarrollo de sus habilidades. “La edad del niño puede ser una guía para los padres, pero no significa que el niño no pueda realizar ciertas actividades antes o después de la edad en la que se encuentre”, menciona.
Según la licenciada un niño de entre los 2 y 3 años es capaz de recoger sus juguetes y guardarlos, tirar su basura, comer solo y regar las plantas. De 4 a 5 años pueden ayudar a poner o retirar la mesa, lavar cubiertos bajo supervisión, organizar sus ropas y su habitación. A los 6 y 7 años podrían ayudar en la cocina a preparar comidas sencillas como ensaladas, sándwiches. “Conforme el niño va creciendo las actividades van teniendo un cierto grado de complejidad. Es importante que en cada etapa del niño con cada tarea que queremos que el niño realice le enseñemos y mostremos como hacerlo primero nosotros con paciencia y comprendiendo que quizás no lo hará como nosotros”, indico.
Actividades. Entre las actividades que pueden realizar los niños en el hogar se encuentran: Recoger y guardar sus juguetes, hacer la cama, regar las plantas, dar de comer a sus mascotas, tirar su basura en el tacho de basura, organizar sus ropas, bañarse y vestiste solo, peinarse solo, atarse los zapatos, poner y recoger la mesa, ayudar a lavar los platos, limpiar su habitación y barrer.
Así también cabe mencionar que hay otras actividades que no son recomendables para los más pequeños del hogar y debemos tenerlos en cuenta para evitar accidentes. “Por eso es importante que cada actividad que el niño realice este acorde a su edad y madurez. A un niño pequeño de 2 años por ejemplo no podemos pedirle que corte verduras porque implicaría un daño para él, podría cortarse debido a no tener las habilidades motoras o de coordinación para tal tarea”, indica la profesional.
Recomendación. La sicóloga recomienda a los padres que confíen es sus hijos y le atribuyan quehaceres diarios sin olvidar que son niños y estos deben tener su espacio de juego libre. Es recomendable enseñarles cómo realizar cada actividad, mostrándole, haciendo con él y finamente dejándole hacer solo, y que las actividades sean incorporadas poco a poco. “Es muy importante la paciencia. Paciencia en el proceso que el niño aprenda a realizar la actividad. Muchas veces los padres prefieren hacerlo ellos mismos por temor a que termine rompiendo algo o por una cuestión de tiempo, por ejemplo”, añade.
Agrega que es necesario ayudar a los niños a responsabilizarse en sus tareas y las distintas tareas del hogar. Se debe confiar en sus capacidades porque son mucho más capaces de lo que creemos. “Además cada actividad por más pequeña o sencilla que parezca aporta beneficios en su desarrollo, así también no hay que olvidar que las tarea sea adaptada a la edad del niño porque existen tareas que el niño podrá realizarlas únicamente si las habilidades que requiere están desarrolladas en el niño”, finaliza.
Responsabilidad. Hay muchas tareas que pueden realizar los infantes en las casas, para aprender a ser responsables y ayudar a las madres.
Influencia sicológica
Las actividades que se enseñan los niños a realizar en la casa tienen varios beneficios y es una muy buena oportunidad para enseñarles valores. A través de las distintas actividades aprenden a ser responsables, disciplinados, colaborativos en cuanto al trabajo en equipo, facilita la instauración de hábitos y beneficia su desarrollo en general. También influye en su autoestima, seguridad y tolerancia a la frustración.
En definitiva se debe aprender que los niños deben ser responsables desde pequeños.