“No hacer de una piedrita una montaña”, había sugerido monseñor Edmundo Valenzuela a los jóvenes ante una denuncia de acoso sexual de una joven catequista contra el padre Silvestre Olmedo, ex cura de la Parroquia San José de Limpio. El caso se elevó a juicio oral para el próximo 7 de junio, y el arzobispo metropolitano será testigo clave. “Es importante que podamos tener la oportunidad de preguntarle a monseñor que si puede explicar lo que calificaron como ‘acto indecoroso’. Sería interesante que él nos pueda decir, concretamente, a qué hechos la Iglesia Católica considera acto indecoroso”, dijo la abogada Sonia Von Lepel.
Recordó que el testigo tiene obligación de comparecer y proveer toda información de las que tuvo conocimiento.