Esta semana vivimos un punto de inflexión.
Con Accelerating Bitcoin, la primera conferencia Bitcoin Only del país, quedó claro que Paraguay no está al margen de la historia: está escribiéndola. Más de 60 disertantes de 16 países, compartiendo escenarios, ideas y pasiones con más de 450 personas que llenaron el espacio con preguntas, debates y sobre todo una nueva mirada sobre un futuro que es prometedor para todos.
Soberanía, energía, minería, educación, regulación, comunidad. Nos miramos en el espejo del mundo y el mundo nos miró de vuelta.
En el escenario se cruzaron académicos con mineros, empresarios con educadores, entusiastas con reguladores. Esa mezcla que en cualquier otro lado parecería imposible de manera, se dio con total naturalidad. Porque Bitcoin es exactamente eso: un punto de encuentro donde caben quienes quieren proteger sus ahorros, quienes buscan escalar negocios globales, quienes ven en la energía un vector de desarrollo y quienes sueñan con un mundo más libre.
Accelerating Bitcoin fue un ensayo general del país que queremos ser: abierto, innovador, conectado, soberano. La gente que viajó desde Japón, Noruega, Estados Unidos, España, México o Argentina no vino a perder el tiempo. Vino porque entendió que Paraguay es el lugar donde la ecuación entre energía, talento y visión tiene sentido.
Las cifras nos señalan que vamos por buen camino: 60 voces internacionales, 16 países, 450 personas, decenas de horas de charlas y talleres. Pero lo más importante no estuvo en los números: estuvo en los pasillos, en las sobremesas, en los asados improvisados, en la red invisible que se tejió entre quienes saben que el futuro se construye en comunidad.
Hoy podemos decirlo sin la menor de las dudas: Estamos presentes en el mapa Bitcoin. Y no como espectadores, sino como protagonistas. Ahora el desafío es simple pero enorme: acelerar las oportunidades que se abrieron en estos días, pasar de las palabras a los proyectos, de las presentaciones a las inversiones, de los contactos a los contratos.
Esta conferencia dejó claro que Bitcoin no es una teoría. Bitcoin es acción. Y tenemos todo lo necesario para ser la vanguardia.