18 abr. 2024

Abogado declaró que el teléfono de los chats lo “perdió”

josé Joselo Rodríguez González

La Fiscalía investiga la participación del abogado José Joselo Rodríguez González en el polémico acuerdo de Itaipú.

Foto: Telefuturo.

Para reforzar la cuasicomplaciente investigación de la Fiscalía a los posibles indiciados por la manipulación del acuerdo de Itaipú, firmado en mayo pasado en absoluto sigilo y en contra de los intereses nacionales, se divulgó que Joselo Rodríguez González declaró el viernes en la Fiscalía Anticorrupción que el teléfono desde el cual había enviado todos los mensajes al ingeniero Pedro Ferreira, cuando este aún era el titular de la ANDE, lo perdió.

La fiscala Liliana Alcaraz confirmó ayer que, efectivamente, el abogado que se presentó ante el presidente de la ANDE como consejero jurídico del vicepresidente Hugo Velázquez, y que era su portavoz en la negociación del acuerdo energético con el Brasil, entregó otro aparato telefónico para ser sometido a peritaje.

“Él perdió su teléfono y retiró otro el 22 de junio”, confirmó Alcaraz, uno de los tres agentes que durante ocho horas escucharon la versión del ahora personaje que saltó al ojo de la tormenta política de la semana pasada. En su declaración había dicho, de todos modos, que ya había eliminado todos los chats a través del WhatsApp con el ex titular de la ANDE.

Sin embargo, pese a la actitud hasta si se quiere divertida con que toma las circunstancias Rodríguez –que intentó negociar una venta exclusiva de energía de la ANDE a la empresa Leros del Brasil, relacionada a la familia del presidente brasileño Jair Bolsonaro y a la cual representa, según sus palabras–, el ingeniero Ferreira también prestó declaración testimonial y entregó todos los mensajes entre él y el abogado, a quien el propio Velázquez había presentado, declaró, como representante suyo.

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.