Aquino accedió a un préstamo de USD 60.000 y dejó como garantía tres cheques firmados sin fechas y el título de un inmueble de 80 ha. ubicado en San Pedro del Paraná, que ahora ya está a nombre de Fernando González Karjallo, hijo de Ramón, precisó el abogado.
La deuda fue saldada en el 2011, pero Aquino no pudo retirar los cheques, ni el título de su inmueble, debido a que el ex dirigente deportivo no se hacía encontrar o si se encontraba, le decía que tenía en otro lugar los cheques.
“Nunca devolvió los cheques y seis años después, en el 2017, Ramón lo ejecutó sabiendo que la cuenta estaba cancelada hacía seis años. Luego fue y realizó la denuncia por estafa contra Aquino en la unidad fiscal de Luque”, relató el abogado.
Primeramente, el caso fue investigado por el fiscal Néstor Cañete, quien imputó por estafa a Aquino, pero meses después el agente fue removido de su cargo y la causa fue designada a la fiscala Sonia Pereira, quien declaró la rebeldía del ex representante de jugadores, porque este no se presentó a declarar ante el Ministerio Público.
“Nunca le notificaron”, resaltó Fialayre, quien contó que una vez, en una barrera de control policial, lo detuvieron a su defendido, de 81 años, enfermo de cáncer y en silla de ruedas por la amputación de una de sus piernas.
El 23 de diciembre pasado, la fiscala Pereira debía presentar su acusación contra Aquino, por ello Fialayre se presentó dos días antes para verificar lo nuevo de la carpeta fiscal, ya que solicitó a la Fiscalía que notifique a RGD a declarar. Sin embargo, la fiscala no mostró lo nuevo de la carpeta fiscal, ni la declaración del empresario luqueño, y presentó la acusación.
“La fiscala me ocultó tres días la declaración de Ramón, me fui el lunes 20, martes 21 y miércoles 23, y no me dio la declaración y se fue a acusar a mi cliente”, detalló el profesional del Derecho.
Más de 500 denuncias
Documentaciones a las que tuvo acceso ÚH demuestran que en menos de 20 años Ramón González Daher realizó al menos 507 denuncias por estafa y apropiación en la Fiscalía.
Incluso, estando en reclusión, RGD promovió al menos diez denuncias por estafa y apropiación en la Fiscalía de Luque, pese a estar investigado e imputado por el Ministerio Público por realizar estas maniobras contra las personas que recurrieron a él para acceder a préstamos con más del 100 por ciento de intereses inclusive.
Según consta en la carpeta de imputación, el modus operandi consistía en otorgar préstamos a personas, quienes, en contrapartida, entregaban como garantía cheques adelantados, firmados y endosados, o se les hacía firmar pagarés. Luego, utilizaba dichos cheques para realizar denuncias ante el Ministerio Público, en carácter de víctima por supuesta estafa.