14 may. 2024

A 3 años de la gesta estudiantil, la UNA aún espera los cambios

Se cumplen tres años de la mayor revuelta estudiantil protagonizada por estudiantes de la Universidad Nacional de Asunción, tras investigaciones periodísticas de este diario que sacaron a luz el alto nivel de corrupción en el Rectorado y en la mayoría de la facultades. Aquella gesta bautizada como #UNAnotecalles sacudió no solamente los cimientos de la universidad, sino abarcó a gran parte de la sociedad paraguaya, pero no fue suficientemente acompañada por los estamentos del Estado y el sistema de Justicia. La auditoría sobre las irregularidades duerme en la Contraloría desde hace dos años y en la carpeta fiscal quedan solamente dos procesados. El reclamando cambio de fondo aún no llegó a la UNA.

Los reportajes de investigación sobre la corrupción en el Rectorado de la Universidad Nacional de Asunción, que este diario empezó a publicar el 8 de setiembre de 2015, desencadenaron una inédita rebelión estudiantil. La serie empezó contando la historia de Tatiana Cogliolo, una joven maestra parvularia que figuraba como profesora en la Facultad de Veterinaria y cobraba 12,6 millones de guaraníes mensuales. Reveló además que la madre y una prima también cobraban como profesoras fantasmas y hasta su hermanita estudiante de secundaria fue adjudicada con un rubro administrativo por el entonces rector de la Universidad Nacional de Asunción, Froilán Peralta.

Las publicaciones despertaron la indignación de los estudiantes, que se declararon en asambleas permanentes frente al local del Rectorado y en las principales facultades, manteniéndose movilizados y en vigilia durante varios meses, dando inicio a una primavera estudiantil que fue bautizada con el hashtag #UNAnotecalles. La masiva solidaridad ciudadana con los estudiantes generó un gran impacto mediático e hizo que el rector Peralta fuese imputado por la Fiscalía, quien tras permanecer oculto durante varios días acabó entregándose a la Justicia y fue preso a la cárcel de Tacumbú.

Como resultado inmediato de la gesta estudiantil, en poco más de un mes de movilizaciones se produjo la forzada renuncia de 2 rectores, 3 vicerrectores, 6 decanos, 5 vicedecanos y unos 38 altos funcionarios, además de 43 funcionarios procesados y 5 en la cárcel. Fue un hecho social que no solo sacudió la estructura de un corrupto y autoritario sistema universitario, sino que interpeló a la misma sociedad paraguaya.

A tres años de aquella gesta, el balance revela que una vez más el sistema de Justicia no respondió de manera adecuada y dio paso a la impunidad. La Fiscalía detectó irregularidades en contrataciones, asignaciones de rubros y cobros de salarios de funcionarios, evaluando que el perjuicio patrimonial fue de 4.000 millones de guaraníes durante la gestión de Froilán Peralta al frente de la Facultad de Veterinaria y del Rectorado de la UNA. De los 52 procesados inicialmente, unos 47 admitieron los hechos y se beneficiaron con medidas alternativas, quedando sobreseídos del caso.

Actualmente, en la carpeta fiscal solo quedan dos procesados: el ex rector Froilán Peralta, por el hecho punible de inducción al cobro indebido de honorarios y lesión de confianza, con un perjuicio estimado en 1.225 millones de guaraníes, y la ex directora de Talento Humano de la UNA, María del Carmen Martínez, por el hecho punible de apropiación y estafa, con un perjuicio atribuido de 242.651.346 guaraníes.

La auditoría realizada por la Contraloría General de la República acerca de las irregularidades duerme en los archivos de dicha institución desde hace dos años. Aunque se produjeron casos de remoción de autoridades y avances en el manejo más transparente de algunas facultades, el sistema cuestionado por los estudiantes aún se mantiene. El reclamando cambio aún no llegó a la UNA.

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.