El Observatorio del Gasto Público de Desarrollo en Democracia (Dende), a cargo del economista Manuel Alarcón, generó un informe en el que relata que en el periodo 2013-2022 la proporción de gastos en la Administración Central, en remuneraciones, respecto de los ingresos tributarios, representó un promedio del 72% y 51% sobre los gastos totales ejecutados.
Esto quiere decir que de cada G. 100 de ingresos en concepto de impuestos a la ciudadanía, se destinaron alrededor de G. 72 en promedio al salario de los empleados públicos de la Administración Central.
Tal como lo refiere el reporte, respecto a la cantidad de cargos, según Hacienda, al cierre de 2013, la Administración Central contaba con 271.180 cargos. Esta cantidad fue en aumento hasta llegar a diciembre del 2022 a 289.726, con lo que se observa un incremento del 6,8%.
Dende remarca la diferencia entre los cargos y la cantidad de funcionarios. Los cargos son mayores que el número de empleados públicos, teniendo en cuenta que existen funcionarios con más de una categoría, producto de los multicontratos en el sector sanitario principalmente, según explica.
En cuanto al peso del gasto en remuneraciones sobre el gasto total obligado, hay un promedio en 2013-2022, del 51,2%. El gasto en remuneraciones significó, en promedio, una proporción ligeramente superior a la mitad del gasto total, durante ese periodo.