EFE
En la demanda, a la que se sumó el Instituto Knight para la Primera Enmienda de la Universidad de Columbia (Nueva York), solicitan al presidente que los desbloquee.
Los siete usuarios demandantes, a los que Trump supuestamente bloqueó por hacer comentarios críticos, argumentan que el presidente utiliza su cuenta personal (@realDonaldTrump) para difundir información oficial del Gobierno, por lo que sus mensajes deberían ser accesibles a todo el mundo.
También alegan que Twitter es un foro público a semejanza de una parque o una reunión ciudadana, espacios a los que no serían vetados.
“Twitter permite a ciudadanos corrientes hablar directamente con funcionarios públicos y escuchar y debatir con otros sobre asuntos públicos de una forma similar a cómo lo harían en una acera, un parque público o una reunión ciudadana”, apuntan en el texto.
La demanda también va dirigida contra el portavoz y el director de medios sociales de la Casa Blanca, Sean Spicer y Dan Scavino, respectivamente.
Trump tiene más de 33.720.000 seguidores en su cuenta personal.