Por Robert Figueredo
Los afectados, que en número serían alrededor de 70, se sienten estafados. “La universidad sabía de la situación de la carrera y nos engañó de esta manera”, lamentó Yudith Ledesma, una de las alumnas de la carrera.
Agregó que hasta el pasado sábado la universidad estaba percibiendo en caja la cuota mensual, a más de derechos de exámenes previstos para los días posteriores.
En una caldeada reunión entre alumnos y directivos de la UPAP, el director de la filial, Raimundo Cañete Cáceres, deslindó responsabilidades asegurando que él cumplió directrices de la sede central. Argumentó que por resolución del año 2006, la carrera se encuentra habilitada.
La alternativa de solución presentada en la reunión consiste en el reconocimiento de materias afines a otras carreras que ofrece la UPAP. Esta propuesta no satisfizo a los afectados que exigen la devolución de lo invertido en materia económica por los meses cursados.