12 sept. 2025

Temer interviene la seguridad en Río de Janeiro y la entrega a los militares

El presidente brasileño Michel Temer decretó este viernes una intervención federal en el área de seguridad en Río de Janeiro, lo cual entrega a los militares la tarea de acabar con una ola de violencia que desangra a ese estado desde hace meses.

Militares Rio de Janeior Brasil.jpg

El presidente de Brasil, Michel Temer, ordenó la militarización de Rio de Janeiro. Foto: EFE

Eduardo Davis - EFE

“No podemos seguir aceptando pasivamente la muerte de inocentes. Es intolerable que estemos enterrando madres y padres de familia, trabajadores, policías, niños y niñas, y que veamos barrios enteros sitiados, con sus escuelas bajo la mira de fusiles”, declaró Temer tras firmar la medida, inédita en la historia de Brasil.

Esa frase del presidente fue casi una fotografía de la cotidianidad de la población carioca, que es víctima desde hace más de un año de una creciente e indiscriminada violencia urbana que el año pasado causó 6.731 muertes, entre las que se cuentan las de más de 100 policías y 10 niños, muchos alcanzados por las llamadas “balas perdidas”.

La decisión de decretar la intervención federal fue adoptada tres días después del fin del carnaval, la fiesta popular más importante de Brasil y, en particular, de Río de Janeiro, donde este año se vio manchada por numerosos y graves episodios de violencia, incluso en los alrededores del popular y vigilado Sambódromo.

Antes de llegar a este extremo, el Gobierno ya había desplegado a mediados del año pasado a 10.000 efectivos de las Fuerzas Armadas en Río de Janeiro, pero con áreas de actuación limitadas y que fueron insuficientes para devolver la tranquilidad a una ciudad que es “la cara” de Brasil ante el mundo.

“Ustedes saben que el crimen organizado casi se apropió del estado de Río de Janeiro”, en una “metástasis que se expande por el país y amenaza la tranquilidad de nuestro pueblo”, dijo Temer en la ceremonia, acompañado por miembros de su gabinete y autoridades de la propia Río de Janeiro.

Según Temer, el decreto entra en vigor “inmediatamente”, pese a que deberá ser ratificado por el Parlamento por imperativos legales.

De acuerdo a la Constitución, las cámaras legislativas deberán ser convocadas para debatir la medida en un plazo de diez días, pero tanto la directiva de la Cámara de Diputados como del Senado ya han manifestado su respaldo a la decisión y anunciado que la estudiarán la semana próxima.

Temer explicó que adoptó esa “medida extrema porque todas las circunstancias así lo exigen” y aseguró que habrá “respuestas duras y firmes para enfrentar y derrotar al crimen” organizado.

La intervención federal fue aceptada por el gobernador de Río, Luiz Fernando Pezao, quien esta semana admitió que las autoridades no estaban preparadas para garantizar la seguridad en el Carnaval, fiesta de la que incluso estuvo ausente el alcalde de la ciudad, Marcelo Crivella, un evangélico crítico de esas celebraciones.

“Río de Janeiro tiene prisa, tiene urgencia. Nosotros solos, con la Policía Militarizada y la Policía Civil, no estamos consiguiendo detener la guerra entre las facciones (del narcotráfico) en nuestro estado”, declaró hoy Pezao, quien también asistió a la ceremonia en que fue firmado el decreto.

Temer también subrayó que la intervención federal, que en la práctica trasladará a las Fuerzas Armadas el comando de todas las áreas de seguridad pública en ese estado, abarcará también sectores como el presidiario y la vigilancia de las carreteras.

De hecho, tanto en Río de Janeiro como en el resto de Brasil muchas de las cárceles están en manos de bandas, muchas de ellas del narcotráfico, que por detrás de los muros de las prisiones dirigen y coordinan las actividades de delincuentes que operan en libertad.

“No veremos más avenidas con trincheras, los presidios dejarán de ser oficinas para los bandidos y nuestras plazas no serán más del crimen organizado”, sino que estarán reservados a “la gente honesta”, garantizó Temer, quien mañana viajará a Río de Janeiro para discutir la actuación de las Fuerzas Armadas durante la intervención.

Más contenido de esta sección
El ex presidente brasileño Jair Bolsonaro fue condenado este jueves por la Corte Suprema a 27 años y tres meses de cárcel por haber conspirado contra el orden democrático tras su derrota en las elecciones de 2022 frente al actual mandatario, Luiz Inácio Lula da Silva.
Nueva York recordó este jueves a las cerca de 3.000 víctimas de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, más los del ataque al World Trade Center de 1993, con el acto anual en el que se mencionan los nombres de los fallecidos y se guardan varios minutos de silencio, reservado a los familiares y a cargos institucionales.
El ex presidente brasileño Jair Bolsonaro fue declarado culpable este jueves de haber atentado contra el orden democrático por la Primera Sala de la Corte Suprema, en un fallo que concluyó con cuatro votos contra uno.
El supremo brasileño alcanzó este jueves una mayoría de tres votos para condenar a Jair Bolsonaro por golpismo, lo que deja al ex presidente a las puertas de una pena de más de 40 años de cárcel.
El ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Diosdado Cabello, negó este jueves que las personas que viajaban en una lancha que destruyó Estados Unidos en altamar fueran narcotraficantes ni tampoco, aseguró, integrantes de la organización criminal transnacional Tren de Aragua, como dijo la administración de Donald Trump.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recordó este jueves en una ceremonia solemne en el Pentágono a las víctimas de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York y Washington.