Según explicaron algunos lugareños a Telefuturo, el desvío del cauce natural del agua provoca la muerte de animales, que quedan bajo agua y prácticamente sin alimentos.
La Junta Municipal de Santa Rita presentó una denuncia por daño ambiental ante la Fiscalía de San Ignacio, Departamento de Misiones, a fin de identificar la identidad de los propietarios de los arrozales.
Por su parte, los propietarios de la empresa arrocera argumentaron que la situación es temporal y que en breve despejarían el cauce de agua.