Según medios italianos, el tunecino, de 24 años, que había cumplido 4 años de cárcel en Sicilia por haber incendiado una escuela en 2011, osciló durante su fuga entre adquirir un pasaje de tren para Milán o Roma. “En la estación de Turín, después de llegar de Francia, fue filmado en 2 ocasiones por las cámaras de vigilancia delante de las máquinas automáticas mientras pedía información sobre los trenes que estaban por partir con destino Roma o Milán”, sostiene el diario Il Corriere della Sera. “Eso demuestra que no tenía un plan establecido. Optó por un tren regional de Lombardía y Milán porque a esas horas, pasada la medianoche, no había un tren para la capital”, asegura el diario. Varios periódicos aseguran que tras llegar a Milán el 23 de diciembre, Amri conoció a un joven salvadoreño al que le preguntó “dónde podría tomar un tren o un autobús para Roma, Nápoles y el Sur de la península”. El tunecino, que había llegado en el 2011 en una barcaza como indocumentado a la isla siciliana de Lampedusa, fue abatido pocas horas después en un tiroteo con la policía en el barrio milanés de Sesto San Giovanni, de cuya estación parten los autobuses hacia España, Marruecos, Albania y también el sur de Italia. AFP