Alcaraz narró lo sucedido como fiscal y testigo del hecho. Contó que en la noche del viernes recibió la información de que un camión cargado de marihuana estaría en la zona de Nueva Italia, por lo que debía acompañar el sábado a los oficiales antinarcóticos.
Este sábado, tres camionetas de la Senad y una del Ministerio Público llegaron hasta la zona de Nueva Italia para allanar una vivienda. En el camino, los rodados detuvieron la marcha al percatarse de que una camioneta blanca que pasaba por la zona, al verlos, retrocedió y aceleró, como huyendo del sitio e ingresó a una plantación de caña de azúcar.
Luego, agentes dispararon contra la camioneta, que se detuvo a unos 200 metros del lugar. Los intervinientes, seguros de que se toparían con comerciantes de droga, se acercaron al vehículo y verificaron que se trataba de una familia integrada por cuatro personas: Ulrico Zanotti Cavazzoni (abuelo de la niña), quien estaba al mando del rodado; su esposa Ana Franco de Zanotti Cavazzoni (acompañante); Viviana Romina Paredes Zanotti Cavazzoni, de 3 años (hija de Ana Romina Zanotti Cavazzoni y Miguel Antonio Paredes) y Alexandro Amadeo Zanotti Cavazzoni Franco, de 30 años (hijo de Ulrico).
“Llegamos en cuatro camionetas a la zona. Frente al móvil de la Senad, que iba en la delantera; una camioneta se nos cruza, al vernos retrocede, hace una maniobra e ingresa a un camino con plantaciones de caña de azúcar. Ahí empezó el tiroteo”, relató el fiscal.
Según el funcionario del Ministerio Público, los agentes conversaron con el hombre que estaba a bordo de la camioneta, quien explicó que como en esa zona siempre se roban vehículos, se asustó al ver a una comitiva y desvió el camino. Dijo no tener nada que ver con drogas.
Álvarez pidió a los agentes que detengan el operativo y trasladen a las dos víctimas hasta un centro asistencial cercano.
El hecho se produjo en la noche de este sábado en la compañía 2 de Mayo de Nueva Italia.
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