La mesa conformada por los trabajadores de la comunicación y el secretario de Estado elaborará un protocolo, con la participación de los responsables del área de seguridad.
La decisión fue tomada tras el pedido de periodistas que desde el pasado jueves realizaron manifestaciones en repudio por el crimen del corresponsal Pablo Medina y su asistente Antonia Almada, quienes fueron acribillados bajo el sello de la mafia fronteriza, en un camino vecinal de la colonia Marchetti, en el distrito de Villa Ygatimí.
“La salida más adecuada y rápida para garantizar ese trabajo es la realización de un protocolo que no determine que decidamos a dedo quiénes son aquellos que ameritan custodia para el cumplimiento de su labor, sino que esto se haga con criterio”, sostuvo De Vargas tras el encuentro.
El ministro dijo que deben garantizar el trabajo de la prensa por la relevancia y la función en el rol social que cumplen.
“Se han respondido las explicaciones acerca del crimen de Pablo Medina, dimos en su momento cobertura aleatoria a su trabajo periodístico, dimos las explicaciones, convenzan o no, seguimos trabajando con el equipo de investigadores que se conformó”, manifestó.
De Vargas mencionó que las sospechas tenidas acerca de los supuestos responsables del crimen se lograron mediante un trabajo científico, luego de realizar los allanamientos.
Entre los operativos emprendidos estos se realizaron en la Municipalidad de Ypejhú, cuyo intendente, Vilmar Neneco Acosta, es sindicado como el autor moral de la ejecución del periodista, así también su hermano Wilson Acosta Marqués, quienes podrían haber cruzado la frontera. Esa es la posibilidad que el intendente se encuentra prófugo desde el día del homicidio, pero ya cuentan con orden de captura y no se descarta que soliciten la búsqueda y localización internacional de los mismos.
PEDIDO. El fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, remitió ayer una misiva al ministro Francisco De Vargas en la cual solicita que a través de la Policía Nacional se garanticen el trabajo de periodistas apostados en la Curuguaty y zonas aledañas, tras el amedrentamiento que se registró el pasado fin de semana a trabajadores de prensa.
Santiago Ortiz, representante del Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP), dijo que el protocolo debe concretarse lo más rápido posible para resguardar a los periodistas que realizan labores peligrosas en zonas de riesgo, como las del EPP y los marihuaneros.
