Bernabé Peralta Miranda tiene 36 años y desde hace 10 se dedica al transporte de carga entre Asunción y Santiago de Chile.
El trayecto implica cruzar parte de la Cordillera de los Andes que, si bien ofrece una plácida vista a los conductores, no deja de ser peligrosa debido a los accidentes geográficos.
Peralta ya se acostumbró a pasar periódicamente por este camino, pero algunas fallas mecánicas en su camión lo sorprendieron este lunes en pleno viaje.
Llevaba 28 toneladas de arroz que cargó en Caapucú. Ya estaba llegando a Chile, hasta que en la zona de Guardia Vieja, a 200 metros del puesto de peaje, los frenos dejaron de responder.
Rápidamente alcanzó los 80 km por hora en una pendiente y debía tomar una decisión: chocar contra las personas que se concentraban en el peaje o salirse de la ruta. En ambos casos, salvar su vida no era una garantía.
Fue así que decidió volcar el vehículo de gran porte, que a su vez cayó desde un precipicio de unos 15 metros. “Si me iba contra ellos, iba a ser un desastre”, relató en comunicación con Última Hora.
Los camioneros que se desplazaban detrás de Peralta lo dieron por muerto, pues el rodado quedó completamente destruido, pero grande fue la sorpresa cuando lo vieron con vida en su asiento.
Lo ayudaron a salir y luego fue trasladado al Hospital San Juan de Dios de Los Andes. Allí le detectaron lesiones leves en algunos tendones y una fisura en la muñeca. Fue sometido a una cirugía sin complejidades y este miércoles volvió a Paraguay vía aérea.
Ahora se encuentra descansando en su vivienda en Guarambaré, junto a su esposa y sus dos hijos. “Le doy gracias a Dios porque no me pasó nada”, reflexiona.
El camión que perdió era de su propiedad y el seguro que tenía solo cubre daños contra terceros. Aun así, se muestra optimista. Dice que se relajará por un momento, para luego recurrir a empresas para seguir trabajando como camionero.