EFE.-
El disco, parte de la primera edición británica de ese clásico, se lo llevó un comprador anónimo, informó la casa de subastas Julien’s.
El álbum se vendió en la última jornada de una subasta llevada a cabo durante varios días con multitud de recuerdos de Starr, que destinará parte del dinero obtenido a una organización caritativa creada por él mismo.
Entre otros artículos, el viernes se colocó por USD 2,1 millones una batería que Starr utilizó en más de 200 actuaciones y para grabar grandes éxitos como “Can’t Buy Me Love” y “I Want to Hold Your Hand”.
El instrumento fue adquirido por Jim Irsay, propietario de los Indianapolis Colts, de la liga de fútbol americano, y que suma la pieza a una colección que ya incluía guitarras de los otros tres miembros de The Beatles: John Lennon, Paul McCartney y George Harrison.