Antes que una inversión, para la parlamentaria el almuerzo escolar es un gasto y “ha surgido como un negocio en el país”.
“No sé si es necesario estrictamente el almuerzo escolar, por qué no nos concentramos en la merienda de media mañana y media tarde para los estudiantes”, insistió la senadora.
Recordó el informe del INAN que determinó el año pasado que el 60% del alimento que se sirvió en 34 escuelas capitalinas oficiales y subvencionadas se desperdiciaron, pero olvidó mencionar la cantidad de municipios que requieren del complemento para chicos en situación de extrema pobreza, pero que por falta de gestión o presupuesto no lo reciben en sus centros y lo solicitan.