“Que se vaya, que se vaya, que se vaya”, era el grito del grupo de funcionarios que en la mañana de este martes volvió a impedir el ingreso de la directora interina de Recursos Humanos de la Cámara de Senadores, Miriam Arroquia.
Los funcionarios tomaron la misma medida el pasado viernes, cuando ya bloquearon la entrada a su oficina para que no pueda iniciar con sus funciones.
La directora se encuentra parada frente a su despacho sin poder ingresar y bajo el resguardo de personal de seguridad de la Cámara legislativa.
“Vamos a tratar de dialogar para resolver este inconveniente porque realmente es lamentable lo que estamos viendo”, expresó el jefe de seguridad, Alfredo Amarilla, a la 780 AM.
Para Arroquia son situaciones normales al producirse cambios en un determinado cargo. La mujer desea hablar con los funcionarios y sindicatos para salir de este momento de tensión y poder trabajar.
“Yo no los conozco a ellos, quiero hablar para que me puedan conocer y luego juzgar”, manifestó la funcionaria interina.
Los gremialistas consideran que el cargo debe ser ocupado por uno de los directores actuales del Senado u otro funcionario con antigüedad.
Una resolución administrativa del titular del Congreso, Mario Abdo Benítez, quien decidió destituir a Arturo Lombardo de la dirección de Recursos Humanos del Senado y nombrar en forma interina a la contadora Miriam Arroquia en el cargo, causó gran revuelo en la Cámara Alta.
“Hay una nueva disposición por parte de la Secretaría de la Función Pública sobre la marcación biométrica y algunas cuestiones que hacen al control más riguroso y necesario, y consideré tener a alguien de mi confianza absoluta para reconstruir este proceso institucional”, había alegado Abdo Benítez.
El titular del Congreso, quien con la movida se ganó el enojo de uno de los sindicatos de la Cámara y de varios senadores, sacó luego la Resolución N.º 1078, por la cual convoca a concurso interno para llenar el cargo de director de Recursos Humanos.
Marito aseguró que a la designada como interina en el cargo “no le va a tocar a ningún funcionario y no hará ningún inventario”.