La doctora Rebeca Escobar manifestó en Monumental AM que ella decidió colaborar con la Policía Nacional para capturar al hombre que torturó a su hijastro de 8 años, luego de ver las lesiones que presentaba la víctima.
“Le pesamos, le medimos, le tomamos la temperatura. Luego, cuando le pregunto dónde tiene los golpes, me levanta la remerita y lo que vi me impactó; fue impresionante ver esas lesiones en todo el cuerpo del chico”, expresó. El niño tenía hematomas por todo el tórax, lesiones nuevas, viejas y cicatrices. A ella le tocó incluso como madre, porque tiene dos hijas pequeñas.
El padrastro admitió la golpiza, pero alegó que lo hizo porque el niño llegó a la vivienda con objetos ajenos más de una vez, que sospechaba eran robados. Sin embargo, el niño y vecinos dijeron que las golpizas eran constantes. En una ocasión ya se marchó de su casa y fue a lo de una vecina, a quien llama tía, donde se siente a gusto.
Escobar conoció el caso el viernes en horas de la mañana. Luego de hacerle la inspección a la víctima, supuso que nuevamente volvería a su casa con su padrastro maltratador. Entonces decidió ir a visitarlo, acompañada de agentes policiales.
No obstante, los efectivos solo tenían una orden de detención y no de allanamiento, por lo que necesitaban que el hombre saliera a la vía pública para poder aprehenderlo.
La propia médica, en compañía de una enfermera, se ofreció para participar del plan de captura y, mientras los uniformados permanecieron escondidos, logró persuadir al hombre para que saliera, y así se logró su aprehensión.
Pero la galena se llevó la sorpresa cuando la propia madre de la víctima le recriminó su acción, en tanto que el niño quedó a cargo de una vecina.
No es el primer caso de violencia
Escobar también recordó otro caso que tuvo hace unos años en Acahay. Un día una mujer llegó con un bebé en brazos, que presentaba quemaduras en un pie. Alegó que se quemó con una mecha casera para hacer fuego, lo cual a Escobar le pareció raro, porque aún no caminaba. Tenía que volver al centro de salud para la curación al día siguiente, pero no lo hizo.
Entonces la doctora decidió pasar por la vivienda durante un recorrido que hace para brindar atención. Vio que la casa tenía un fogón, por lo que preguntó nuevamente a la madre para que diga qué le pasó al bebé y, finalmente, ella admitió que su marido le había provocado esas heridas al hijastro.
Tanto el hombre como la mujer terminaron en la cárcel porque la madre tenía una causa abierta por violencia intrafamiliar contra una hija de 3 años.
En ese sentido, la entrevistada aseguró que hay más casos de violencia en la zona, pero no se denuncian.