19 abr. 2024

Masi y Giuzzio reclamaron a De Vargas por acusaciones

El debate ayer en el Senado se centró en la visita de Arnaldo Giuzzio y Luis Alberto Wagner a los hermanos Gregorio y Víctor Morales, sindicados supuestamente como brazos logísticos de Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).

En la polémica.  Arnaldo Giuzzio, Desirée Masi y Pedro Santa Cruz, en la Cámara Alta.

En la polémica. Arnaldo Giuzzio, Desirée Masi y Pedro Santa Cruz, en la Cámara Alta.

La polémica se desató en torno a las declaraciones del ministro del Interior, Francisco De Vargas, quien habló de un vínculo entre el PDP (Partido Democrático Progresista) y el grupo guerrillero.

La senadora Desirée Masi alegó que ya estaban cansados de “sus pavadas”, por lo que exigió que se ratifique o se rectifique en sus acusaciones.

Giuzzio hizo un relato sobre la visita y la conversación con los hermanos Morales, recordando incluso que a uno de ellos lo había procesado cuando fue fiscal.

Finalmente, se decidió aprobar un pedido de informe dirigido al Ministerio del Interior sobre los supuestos elementos de prueba contra la bancada del PDP.

“Los médicos no hacemos diagnósticos sobre salud mental en público”, dijo Masi, a quien por momentos le salía la voz entrecortada, sobre todo cuando recordó que su hijo figura como blanco del EPP.

“No le defiendo a Morales (...), lo he procesado, son delincuentes. Que se pudran en la cárcel por lo que hicieron, pero no por lo que no hicieron”, consideró Giuzzio.

“Me siento indigno de estar acá con ustedes si es que efectivamente formo parte o tengo vínculos con esa banda criminal. No se merecen y la gente que me votó mucho menos”, manifestó.

Fue entonces que como moción de privilegio solicitó que se pida explicaciones al ministro del Interior.

El liberal Miguel Abdón Saguier también cuestionó las acusaciones de De Vargas, y sugirió que mejor se dedique a perseguir a “motochorros”.

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