30 abr. 2025

“Hay que regular el aporte de campaña porque es la puerta de la corrupción”

La necesidad de empoderar a la gente a través del ejercicio de la política como herramienta de participación y un mayor control al financiamiento de los partidos fueron temas de análisis por parte del analista español Juan Vera Gil, quien estuvo en el país.

Foto: UH Edicion Impresa

Foto: UH Edicion Impresa

Roberto Irrazábal

El ejercicio de la política desde las organizaciones sociales como una forma de lograr cambios en las políticas públicas es un tema que trajo a analizar el experto español en coaching político Juan Vera Gil, quien también expresó, al ser consultado por ÚH sobre la importancia del control al financiamiento de las campañas políticas, que es clave poner topes y controles, ya que es donde empiezan las prácticas corruptas.

–¿Cómo ve la importancia de que la gente asuma más protagonismo en la política o en el diseño de las políticas públicas?

–Lo que podemos leer en el mundo interconectado en el que estamos es que se está transfiriendo el poder de las élites a la sociedad. Lo que vemos en el mundo es que la sociedad empieza a tener una posición adversa a las élites, piensa que ha habido abusos de las élites, empieza a dudar de la representatividad de los partidos. Junto con eso, lo que está claro con los medios y redes es transmitir que la sociedad tiene poder. Hay muchos micropoderes, como por ejemplo cuando una comunidad impulsa un proyecto de ley, y la segunda línea es la tecnología que viraliza y cambia prácticas, como las redes sociales, que todavía hay que analizar. Estamos en tiempos de cambio, y aquellos que tienen conciencia del poder que pueden tener, pueden ser protagonistas de un momento político, porque mucha gente dice que siempre estuvieron los partidos, pero trescientos años atrás no existían o eran grupos elitistas.

–¿Cuál es el planteamiento actual o lo que viene?

–Lo que yo planteo es la corresponsabilidad que existe en el fenómeno político, en el desgobierno o incertidumbre, cuánta corresponsabilidad hay, ya que hay ciudadanos que optan por sentirse víctimas de una situación y no corresponsables de esa situación, por ahí creo que está el primer plano que se debe abordar en este momento.

–¿Cómo hacer que la gente pase de la crítica a la acción?

–Hay una habilidad que me parece clave en este siglo, que es la articulación, cómo enseñamos eso, cómo generamos capacidad de diálogo, y hay un cambio detrás de todo esto más cultural que técnico, y cuando empiezas a trabajar en el coaching político en la sociedad, se ven elementos que van unidos que se pueden trabajar, grupos que se sienten empoderados, como los jóvenes o grupos que pueden generar innovación social, y este concepto es fundamental, que está fuera de la visión politiquera de solo buscar poder, es buscar nuevos caminos de incidencia, donde pueden entrar las universidades, comunidades o empresas con responsabilidad social. Donde predomina el desencanto no hay esperanza de que prospere esto, porque cuando se denuncian sucesos cuestionables a veces se cae en la desesperanza o imposibilidad.

–¿Cuál es el rol del coaching en estos casos?

–Lo más importante del coaching es cuando mueves a una persona de la imposibilidad a la posibilidad. Cuando las personas empiezan a creer en sí mismas y se hacen corresponsables pueden generar cambios, y hay muchos ejemplos en la historia, no solo antigua sino actual. Esos grupos plantean la posibilidad y ahí puede emerger la fuerza social y las redes pueden proyectar y generar agendas valóricas, políticas o legislativas.

–¿Qué fenómenos actuales le llaman la atención?

–Como fenómenos, a mí lo que me preocupa más es la disrupción tecnológica, el mundo digital va a alterar el mundo de los empleos, por ejemplo, nadie va a hacer lo que hace hoy, y eso transforma la realidad de una manera brutal. En Chile, mis consultorías tienen que ver con la calidad de la educación, y al hablar con la gente, no tienen mucha idea de lo que hay que formar a la gente que va a salir en diez años, porque el mundo digital va a cambiar la lógica del trabajo, y va a generar tensiones y posibilidades. Otro fenómeno es la dificultad del ser humano para dialogar, y creo que quizás este mundo de éxito ha restado la importancia al esfuerzo, hoy en día el ciudadano es un consumidor de política, la sociedad de consumo ha arrastrado hasta a la política.

–Aquí estamos en época electoral, pero no vemos propuestas, sino más bien descréditos mutuos, ¿cómo ve eso?

–Que no haya propuestas no es nada bueno, pero el problema es cuando no tengo propuestas y entro al ruedo político a descalificar al contrincante, y eso sigue produciendo una suerte de aversión a la política. En muchos países, la dificultad para ver las propuestas es porque el político sabe que el cuento de siempre ya no sirve, que debe abrirse y ver qué quiere la sociedad. Yo no soy experto en política paraguaya, pero tengo una idea clara, que es que lo mejor que le puede pasar al país es abrirse a ideas innovadoras, dar paso a los que tienen ideas nuevas, pero esto no es fácil y hay que ser capaz de ganar esa posición.

–¿Cómo ve la importancia de controlar el financiamiento de los partidos políticos para sus campañas electorales?

–Creo que el mundo más desarrollado ya se ha enfrentado a ese problema, no hay que descubrirlo, y creo que es fundamental la regulación de aportes a las campañas, porque esa es la puerta grande por donde entra la corrupción. Uno puede decir que hay gente noble aportando, pero la realidad de la corrupción en el mundo es que ha crecido en la medida en que las campañas se han financiado de formas no transparentes y por fondos que provenían de particulares con intereses propios. Este es un tema técnico que es indeclinable, y que si se quiere construir una sociedad diferente, hay que exigir y reclamar estos controles, porque de lo contrario, habrá solo representantes con un alto nivel de deuda moral, que si bien no es económica, de alguna manera la pagas.

PERFIL
Juan Vera Gil es un consultor español experto en Coaching Político. Formado en la Universidad Politécnica de Madrid, es consultor en Estrategia Organizacional y Gestión del Cambio, Coach Político y Directivo desde 1994. Ha sido coach de 7 ministros y 11 subsecretarios de los Gobiernos de Chile. Dirigió la Escuela de Negocios ESDEN en Madrid entre 1987 y 1994, es socio director de Gestacción Consultores, dirige el programa de coaching político de Newfield Network.