CIUDAD DEL VATICANO
El papa Francisco sustituyó al responsable de la doctrina de la Iglesia Católica, el cardenal Gerhard Mueller, una de las figuras más poderosas del Vaticano, por el arzobispo español Luis Francisco Ladaria.
El cardenal alemán, de 69 años, que encabezó durante cinco años el poderoso departamento responsable de la doctrina de la Iglesia, la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF), se había enfrentado al Papa sobre reformas claves.
Fue uno de los cardenales que cuestionaron la intención de Francisco de adoptar una actitud más benevolente con la gente a la que la Iglesia consideraba tradicionalmente como “pecadores”, incluidos los divorciados que se casaron en segundas nupcias y que quieren comulgar.
Mueller también estuvo envuelto en la controversia suscitada por la respuesta de la Iglesia a los abusos sexuales perpetrados por clérigos, después de que su departamento fuera acusado este año de obstruir los esfuerzos de Francisco para acabar con el encubrimiento de esas agresiones.
El Vaticano indicó que el mandato de cinco años de Mueller no será renovado y que lo sustituirá el secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el arzobispo español Luis Francisco Ladaria Ferrer, de 73 años.
Ladaria fue nombrado miembro de la CDF por el papa emérito Benedicto XVI en 2008 y, el año pasado, Francisco lo puso al frente de una nueva comisión encargada de estudiar la posibilidad de tener a mujeres diáconas en la Iglesia.
Puede que el Pontífice no apreciara la “excesiva exposición mediática” de Mueller y sus “intervenciones... que casi siempre dieron la impresión de que se estaba distanciando del Papa”, escribió el experto vaticanista Andrea Tornielli en el Vatican Insider.
El año pasado, la decisión de Francisco de abrir la puerta a la comunión para divorciados casados en segundas nupcias provocó el enfado de los miembros más conservadores del clero.