Rubén Darío Balmaceda descubrió que una oficina operaba bajo su nombre, enfrente del Palacio de Justicia de San Lorenzo. Luego de denunciar ante las autoridades el hecho, una comitiva fiscal judicial montó una cámara oculta para desenmascarar a los responsables.
Cayó detenido en el operativo Sosonte Rodas Rolón, quien hacía de gestor en la oficina, especialmente para la autenticación de copias de documentos. En comunicación con Noticias Paraguay había argumentado que desconocía que las firmas del escribano, que expedía documentos como Balmaceda, eran falsas.
Pero fue Freddy Ubaldo Achinelli quien se presentó como escribano y también fue preso como supuesto autor de la estafa. En su poder se encontró el sello que utilizaba y que, según explicó Balmaceda, carece de legalidad al no contar con número de teléfono.
El escribano, cuya firma fue falsificada en al menos 1.000 documentos, de los cuales en gran cantidad fueron admitidos en el Poder Judicial, recibe llamadas de quejas de las personas estafadas y lamenta que los delincuentes atenten contra la reputación de su trabajo. “Somos una familia tradicional de escribanos. Estoy totalmente perjudicado”, expresó en comunicación con ÚLTIMAHORA.COM.
Los documentos quedan sin efecto al ser falsificados y los trámites deben realizarse nuevamente en una escribanía.
Tanto Rodas como Achinelli permanecen presos y aguardan la imposición de medidas.