“Sufrió mucho durante la guerra, les faltó agua y comida en muchas ocasiones, pero hoy está feliz de festejar su cumpleaños. Está lúcido y disfruta el momento”, comenta Isabel, una de sus hijas.
Remigio es oriundo de Paraguarí. Tras la guerra se dedicó a la agricultura, y hace una década migró a la ciudad de Itá en el departamento Central, enviudó hace aproximadamente 30 años, pero vive rodeado de sus seis hijos, tres hijas, unos 30 nietos y 15 bisnietos.
“Ahora ya se cuida con la comida, pero en sus tiempos de juventud se alimentaba muy bien, como todo hombre del campo paraguayo”, explica la hija.
El excombatiente es un hombre muy callado, pero cuando sus nietos quieren saber más de la guerra, siempre está presto para compartir sus anécdotas.
Este sábado, en el día de su onomástico, también llegaron hasta Itá otros excombatientes de la zona de Yaguarón que compartirán este día especial con su camarada.
Los hijos de don Remigio instan a tener más presente a los excombatientes que defendieron la patria y en muchos casos son olvidados por el Estado y hasta por su propia familia.