Cada 1 de mayo se celebra el Día Internacional de los Trabajadores, fecha que conmemora una lucha de obreros a finales del siglo XIX para exigir mejores condiciones laborales, entre ellas, menos horas de trabajo.
Sin embargo, para las centrales obreras no es un día para festejar, porque aseguran que existen muchas reivindicaciones laborales pendientes.
Los trabajadores salieron este lunes a las calles y marcharon por el microcentro de Asunción. Uno de los puntos fue la sede del Ministerio de Trabajo.
En ese lugar quemaron un muñeco del ministro de Trabajo, Guillermo Sosa, como señal de protesta y repudio. Los obreros acusan al secretario de Estado de ser un “violador de los derechos laborales”.
Durante la movilización estuvieron presentes docentes, médicos, enfermeros, trabajadores sexuales, entre otros, informó Telefuturo.
Eduardo Ojeda, de la Corriente Sindical Clasista (CSC), dijo que existe un desfasaje entre el salario mínimo actual y el costo de vida. Aseguró que pagar los costos básicos ya supera los tres millones de guaraníes, mientras que el salario mínimo es de unos dos millones.