De concretarse este plan oficialista, entrará en escena el TSJE que, según el artículo 290 de la Constitución Nacional, dispone de 180 días para convocar a un referéndum. Si el resultado de este es afirmativo, la enmienda quedará sancionada y promulgada, incorporándose al texto constitucional.
Lo concreto es que aprobada la enmienda por ambas Cámaras del Congreso, se remitirá el texto al TSJE para que convoque y organice la consulta popular del referéndum.
El titular de la Justicia Electoral, Jaime Bestard, había manifestado reiteradas veces que el único límite que existe a nivel de tiempo es el de la convocatoria a las elecciones generales (22 de agosto), por lo que necesariamente el referéndum debe realizarse a más tardar en julio.
“Lo que nosotros debemos hacer es llevar a cabo ese referéndum, si así se decide en el Congreso, antes del 22 de agosto”, había dicho Bestard.
El pasado 22 de marzo, Bestard había afirmado que el máximo organismo electoral está preparado para llevar adelante el referéndum que buscan los sectores del oficialismo cartista en el Partido Colorado, junto a los referentes del Frente Guasu y del sector llanista del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), interesados en que se apruebe la enmienda constitucional que habilite la reelección presidencial.
“Esta institución está muy bien preparada para cualquier desafío, saben que hasta podría darse la situación de un referéndum, y en ese caso tendremos que trabajar también, este mismo equipo va a tener que trabajar sobre ese evento si se produce”, había dicho durante el encuentro de la Comisión Coordinadora de Elecciones del TSJE.
El titular de la institución electoral sostuvo que la institución tiene la capacidad y elasticidad para amoldarse a cualquier situación, sobradamente, en alusión a la posibilidad de que en cualquier momento sea aprobado en el Congreso el proyecto de enmienda constitucional.
Sin embargo, estas declaraciones las realizó hace unos días cuando aún no había ocurrido lo que se dio el martes último, cuando el grupo de 25 senadores forzaron una reunión que autoproclamaron sesión especial, para aprobar tres artículos del reglamento interno de la Cámara Alta, y posibilitar una nueva presentación de proyecto enmienda, dentro del mismo año legislativo. Debe recordarse que el 25 de agosto del 2016 el Senado ya había rechazado un proyecto de enmienda constitucional.