"¡Qué bueno que estemos aquí este domingo! Pero tenemos que ser como los buenos amigos, que están para las buenas y las malas, y acompañar a Jesús Cristo también en su momento difícil durante esa semana para entonces celebrar la Pascua y su resurrección”, proclamó Sturla.
Después de bendecir las ramas de los fieles, el cardenal guió la procesión por la calle Rincón del barrio Ciudad Vieja hasta la Catedral Metropolitana, en donde culminó la ceremonia con una misa.
Entre los presentes, el difusor cultural Pablo Marks contó a Efe que asiste a esa jornada hace diez años y está contento de verla presidida por el ahora cardenal Sturla -hasta hace poco arzobispo-, a quien admira por considerarlo “una persona del pueblo, de los pobres”.
“No soy católico, creo en Dios y en la filosofía, y la iglesia me ofrece un lugar para llegar a Dios”, observó.
Según el Latinobarómetro “Las religiones en tiempos del Papa Francisco”, publicado en 2013, Uruguay se ubica como el país con menor porcentaje de católicos de América Latina -el 41 % de su población- y como el Estado con mayor tasa de ateos y agnósticos, el 38 % de los ciudadanos.
Por ello y por tener el Estado oficialmente separado de la Iglesia por Constitución, es considerado el país “más laico” de la región.