Los testigos y víctimas son los turistas que quedaron varados en la pequeña isla después de no lograr salir con la inminente llegada del huracán Irma, que la semana pasada arrasó con el 70% del país.
Los turistas eligen no salir de sus hoteles por miedo a ser asaltados, mientras que policías enviados especialmente para resguardar la zona combaten a los saqueadores de comercios, informó el portal RT Noticias.
Francia, Países Bajos y Reino Unido enviaron refuerzos policiales y cientos de tropas hacia las zonas para combatir el caos y la delincuencia. Tampoco tienen energía eléctrica, teléfono, internet ni agua.
Francia ha enviado 500 agentes, mientras que algunos residentes optaron por armarse ante esta amenaza. Reino Unido desplegó otras 500 tropas de la Marina Real y 50 efectivos policiales en las islas Vírgenes británicas, donde varios presos escaparon de una cárcel y sospechan que están armados.
En el centro de Marigot, capital de la parte francesa de San Martín, muchos negocios permanecen cerrados, algunas cortinas metálicas muestran signos de haber sido forzadas y detrás de varias vidrieras rotas se ven maniquíes y perchas que antes mostraban prendas.
Cerca del 95 % de las viviendas en la isla San Martín fueron dañadas y dejó a miles de familias en la calle. En la zona hay neumáticos, vehículos volteados y escombros de las viviendas destruidas.