Parlamentarios próximos a Lula ya informaron el jueves sobre el fallecimiento de Rocco, pero la muerte todavía no fue ratificada por el hospital, que debía concluir un protocolo médico antes de oficializar el óbito. El jueves, el Hospital Sirio Libanés anunció en un boletín médico que no había flujo sanguíneo en el cerebro de Rocco e inmediatamente después la familia de Lula, a través de las redes sociales, autorizó los procedimientos preparatorios para la donación de sus órganos.
Ese mismo día la diputada del Partido de los Trabajadores (PT) Benedita Da Silva anticipó en el pleno de la Cámara de los Diputados que Marisa Leticia Rocco “falleció” y precisó que contaba con la autorización de Lula para comunicarlo. El centro médico concluyó ayer el protocolo necesario para ratificar la muerte cerebral de Rocco e informó en un boletín médico que el óbito fue constatado a las 18.57 local.
El velatorio de Rocco, de 66 años, hoy sábado en el Sindicato de los Metalúrgicos de São Bernardo do Campo, donde la ex primera dama conoció a Lula hace 44 años, cuando acudió a recoger documentos para solicitar su pensión como viuda. efe
