@AngBarrientos
Si de ganar se tratara para Cerro Porteño, está claro que elegirá por siempre jugar en su casa, ante su pueblo, sitio donde aún no conoce derrota alguna desde su inauguración.
Fue la primera victoria del campeón en el torneo y dejó claro que en su reducto será muy difícil derrotarlo. Porque la Nueva Olla tiene eso, un peso extra para el rival; es al menos lo que pudimos observar en cada juego y victoria azulgrana en barrio Obrero.
Un tiempo. Cerro Porteño necesitó solo un tiempo para vencer a Sol. Tras una pálida imagen expuesta en la primera parte tuvo su recuperación en la complementaria. Un gol al inicio y otro, diez minutos después, fueron suficientes para dejar los puntos en casa.
Los puntos más altos pasaron por los rendimientos de Rodrigo y Jorge Rojas, Santiago Arzamendia y Óscar Ruiz. El equipo despertó a tiempo y transmitió tranquilidad al pueblo azulgrana.
Sol de América no se animó nunca y cuando intentó jugar ya fue muy tarde. Los cambios en el segundo tiempo dieron muestras de que la historia podía ser diferente si empezaban antes.
Cerro ganó y dice presente en el torneo. Una victoria necesaria para el plantel, pero sobre todo para el cuerpo técnico de Luis Zubeldía, que tuvo su debut en el nuevo estadio capital del sentimiento.
