19 abr. 2024

¿Cómo no temer a los payasos?

Así la vimos

Foto: UH Edicion Impresa

Foto: UH Edicion Impresa

Sergio Cáceres Mercado

Sergio209@lycos.com

Aprovechando el miedo natural que muchos tienen hacia los payasos, Pennywise empezó a atemorizar a muchos desde la novela de Stephen King, pasando por aquella pionera adaptación de 1990 hasta llegar a la que actualmente tenemos en cartelera. Sin duda, esta última es mucho más terrorífica, pues utiliza los recursos disponibles para el cine de terror que no se tenían 27 años atrás.

Aquellos que leyeron la novela original admiten que esta nueva adaptación es mucho más fiel que aquella de 1990, aunque no hay que olvidar que aún falta la segunda parte por venir. Como estrictamente la historia tiene dos fases, una donde los niños se enfrentan al payaso-monstruo por primera vez y la otra donde vuelven a encontrarse para lo mismo 30 años después, la adaptación de 1990 fue hecha en formato miniserie y luego editada como largometraje de más de 3 horas. Esta nueva versión decide contar la primera fase nada más, y por eso es más corta. Cuando se estrene la segunda parte, tendremos la historia completa.

El payaso actual es mucho más aterrador –y simpático y perturbador a la vez–. Al empezar, la famosa escena del barquito y el encuentro de Georgie con el payaso en las alcantarillas es de lejos excelente en su factura y en la actuación de Bill Skarsgård como Pennywise. Desde ahí hay una escalada de situaciones sobrenaturales que dejan helado a más de uno.

Las cosas en la producción cinematográfica no son como antes y ya se animan a mostrar situaciones muy fuertes con niños como protagonistas. Esto da a la película un poderoso verismo, y los golpes que efectúa se sienten más, pues los niños sufren todo tipo de tortura sicológica, e incluso algunos son mutilados. De eso se trata, de un grupo de amigos que en su pubertad tuvieron que enfrentarse a un monstruo horrible. Ya el hecho de ver a un puñado de chicos pelear valientemente contra algo más grande y aterrador que ellos despierta sentimientos de identificación y simpatías.

Para los seguidores de Stephen King, esta película seguro les gustará. En el ámbito del cine de terror actual cumple con todo lo esperado, aunque en sí no sea extraordinario y ya no sea totalmente original, seguro a más de uno despertará fantasmas internos escondidos hace mucho.

Calificación: ***1/2 (buena a muy buena).