Cibulkova, por su parte, que había cedido sus dos primeros encuentros, se mantiene viva todavía, pendiente del partido que disputarán a partir de las 13:30 (CET) Kerber y la estadounidense Madison Keys.
Si la germana gana en dos sets, “Domi” se clasificará para las semifinales, pero si la estadounidense arrebata un set a la número uno del mundo, la eslovaca quedará fuera, y Keys acompañará a Kerber, y se enfrentará contra la rusa Svetlana Kuznetsova en semifinales.
“Quería ganar este partido porque sabía que así mis opciones para lograr las semifinales seguirían vivas”, dijo Cibulkova tras el encuentro. “Estaba concentrada en cada punto, y no me importaba perderlo, me volvía a concentrar y a luchar de nuevo”, añadió la eslovaca, una de las tres novatas este año.
Halep, finalista hace dos años, jugó disminuida por una lesión en la rodilla izquierda y eso mermó su juego. Apareció en pista con una protección en esa zona, y sus movimientos no fueron lo suficientemente rápidos para controlar a la eslovaca.
La rumana se golpeó el cuádriceps de esa pierna con rabia, porque no llegaba a los paralelos de Cibulkova y gesticulaba continuamente, porque en los largos intercambios, sobre todo en el noveno juego del segundo set (10 minutos y 22 segundos) acababa agotada. Tras una hora y 48 minutos cedió por cuarta vez en seis encuentros contra Dominika.
