Una comitiva paraguaya integrada por el mismo fiscal general, Javier Díaz Verón, y el fiscal de Asuntos Internacionales, Juan Emilio Oviedo, viajó ayer a Campo Grande, Mato Grosso do Sul, y mantuvo una reunión con representantes de la Policía Federal. También estuvieron el fiscal de Salto del Guairá Lorenzo Lezcano y el cónsul paraguayo, Ángel Adrián Gill Lesme.
Los policías federales argumentaron su decisión de negar la deportación señalando que el Supremo Tribunal Federal dictaminó en contra de esta figura, informaron fuentes del Ministerio Público.
Asimismo, se dispuso la remisión de Neneco Acosta a una cárcel de máxima seguridad brasileña, mientras se dirime la cuestión de su nacionalidad, indicaron.
Acosta fue detenido el miércoles pasado en Naviraí, Brasil. En la noche del jueves un magistrado de Mato Grosso do Sul rechazó decretar su prisión preventiva.
El día siguiente, el Supremo Tribunal Federal dispuso su reclusión preventiva con fines de extradición y horas después el juez federal Dalton Igor Kita Conrado dictó su detención con fines de deportación.
REVÉS. De esta manera, la extradición es la única posibilidad de que Neneco sea juzgado en Paraguay por los crímenes que presuntamente cometió. El mismo no cuenta con proceso alguno en Brasil.
Para empezar los trámites de extradición, los fiscales paraguayos presentaron en la tarde de ayer el pedido formal ante el Juzgado Penal de Garantías de Curuguaty, a cargo de Carlos Martínez.
Al respecto, el mismo fiscal Oviedo explicó que no existe un plazo de duración para los procesos de extradición, que pueden durar meses y hasta años en algunos casos.
La cuestión de la nacionalidad de Acosta es clave, ya que la ley brasileña prohíbe la extradición de sus connacionales. Desde que fue detenido, Vilmar alega que es brasileño.
EXTRADICIÓN. “Acá lo positivo es que Acosta Marques, quien cuenta con orden de captura y se encuentra prófugo de la Justicia paraguaya, seguirá detenido en el vecino país debido a que así lo resolvió la autoridad máxima judicial de Brasil. En este sentido agradecemos la cooperación de la Justicia brasileña”, expresó el fiscal general del Estado.
“Nosotros desde un primer momento nos pusimos en contacto con las autoridades del vecino país, y el propósito siempre fue darle una pronta salida al caso, cuyo principal objetivo era la deportación de Vilmar Acosta”, añadió.
Sobre el punto, el titular del Ministerio Público afirmó que a partir de ahora los fiscales trabajarán en la extradición.
“Ahora el escenario es distinto, y debemos ir a otra instancia, que consiste en el proceso de extradición. En ese sentido, el equipo de trabajo ya remitió todas las documentaciones por las vías correspondientes”, comentó.
Vilmar Neneco Acosta está procesado por el homicidio de Medina y Almada, por tráfico de marihuana, por el asesinato de Julián Núñez y por el hallazgo de restos humanos en la vivienda de su padre en Ypejhú. Se expone a penas que pueden ir hasta a 30 años de prisión.
