CONCEPCIÓN
En la investigación que realizan auditores del Banco Nacional de Fomento (BNF) en torno a un faltante de G. 135.000.000 de ahorristas de la sucursal Concepción, se constató que todas las transacciones que estaban siendo realizadas por dos funcionarios involucrados, se hacían a espaldas del gerente de la institución, Alfredo Serviano.
De hecho, se calcula que el contador autorizaba el pago, para no levantar sospecha.
Como consecuencia, se hallan separados de sus funciones Alejandro Barrios y José Argüello, contador y cajero respectivamente.
La verificación especial se realizó a raíz de la denuncia realizada por una clienta identificada como Rosa Beneri, quien al intentar extraer sus ahorros en la central de Asunción encontró un faltante de G. 35.000.000, pese a contar con todos los documentos de depósito.