14 may. 2025

Afirman que la ruta 3 se hundió por falta de mantenimiento

En el MOPC ya sabían que donde se produjo el hundimiento en Santaní, en el que quedó atrapado un bus con 50 pasajeros, requería de una urgente intervención. Gremios dicen que el mantenimiento de rutas es urgente.

Colapso.  Ayer procedieron a rellenar en la zona del hundimiento de la ruta 3 en Santaní.

Colapso. Ayer procedieron a rellenar en la zona del hundimiento de la ruta 3 en Santaní.

El hundimiento de la ruta 3 Gral. Elizardo Aquino en Santaní, San Pedro, que dejó atrapado a un bus con 50 pasajeros, evidencia la falta de mantenimiento de las rutas nacionales en el país, según manifestaron expertos del sector de la construcción vial.

Es más, en el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) ya sabían que la zona afectada requería de una urgente intervención, según manifestaron desde la propia cartera en un comunicado, pero igual seguían permitiendo el paso vehicular, apeligrando la vida de las personas.

“El tramo que se hundió se construyó en el año 87 más o menos y tiene unos 30 años. La obra aguantó varios fenómenos de El Niño, incluso lluvias más grandes que las de ahora. No hay obra que pueda aguantar 100% contra la naturaleza. Pero el caso particular que ocurrió en la ruta 3, después de 30 años de su construcción, evidencia que las rutas antiguas requieren de mucho control y mantenimiento”, expresó el ingeniero Guillermo Mas, presidente de la Cámara Vial Paraguaya (Cavialpa).

Continuó: “Es como cuando se construye una casa y no le hace el mantenimiento, por lo que esa casa se vendrá abajo después de 30 años. No hay dudas de que el Estado debe destinar mucho más dinero en el mantenimiento de las rutas del país”, expresó el profesional de la construcción.

ADMITIDO POR TODOS. Por su parte, el ingeniero Hugo Florentín, presidente de la Asociación Paraguaya de Carreteras (APC), señaló que todas las rutas del país tienen déficit de mantenimiento, lo cual consideró como algo innegable admitido por todos, tanto por el MOPC como por el sector privado.

“Solo hace unos años se implementaron los sistemas de mantenimiento planificado, ya que anteriormente el mantenimiento lo tenía exclusivamente el MOPC con sus equipos y obviamente hay que entender que la capacidad de recursos del Ministerio, tanto en quipo, de personal y disposición de presupuesto, no es óptima para mantener adecuadamente todas las rutas”, agregó.

Florentín agregó que con el apoyo del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo, se empezó a programar el mantenimiento por parte de empresas privadas, con contratos Gmas (gestión de mantenimiento por niveles de servicio), y el año pasado surgió otro tipo de contrato Crema (rehabilitación y mantenimiento por índices de servicios).

Estas son nuevas opciones que hoy se tienen, para tratar de cubrir ese gran déficit de mantenimiento que tenemos tradicionalmente en las carreteras. En el caso de lo que pasó en la ruta 3, el hecho de que no se hayan tomado acciones que evitaran el colapso evidencia negligencia.

TRABAJOS. El consorcio Ecomipa-Tocsa ya venía realizando los trabajos de mantenimiento de la ruta 3 en los tramos de Limpio, Emboscada, Arroyos y Esteros, San Estanislao-Rotonda Arroyo Tapiracuái y Rotonda Calle 6.000, pero no previeron mejoras en la zona donde ocurrió el hundimiento del tramo.

Ahora el MOPC procedió a la firma de un convenio modificatorio con la contratista para que también se encargue de realizar las tareas que sean necesarias en la zona del percance a fin de dar una solución definitiva al problema.

Una situación similar ocurrió en el km 389 de la ruta 3 en diciembre pasado, en la zona de Azotey, donde se produjo un gran desmoronamiento del asfalto. En esa ocasión, justificaron que diques clandestinos de la zona ocasionaron el percance.