No es la primera vez que Adele experimenta problemas con su voz. Ya en el 2011, tras una hemorragia de la cuerda vocal, que la dejó necesitada de cirugía, la cantante se vio obligada a abandonar una serie de espectáculos que debían realizarse ese año.
Por ello, y por que en el mes de marzo la cantante declaró que no sabría si alguna vez volvería a hacer una gira, no está claro si los fans tendrán otra oportunidad de verla actuar.
Su última gira, en la que promociona su último disco, 25, comenzó en Belfast, Irlanda, en marzo del año pasado y ese fue su primer concierto en suelo británico en cuatro años y medio.
Desde ese show ya se ha presentado en 119 ocasiones en el mundo entero, y su plan era acabar con la gira en Londres, donde se presentó en el estadio de Wembley y reunió en dos noches a unos 98.000 aficionados, según informa The Guardian.
Los aficionados de Adele han expresado su decepción y enojo por el hecho de que la estrella cancelara sus dos últimas actuaciones, previstas para el último fin de semana.
La cantante, por su parte, se disculpó ante sus seguidores en un post compartido en las redes sociales. “Estoy bajo tratamiento médico y simplemente no puedo actuar. Decir que tengo el corazón roto es poco. ", expresó.
En la nota también explicó que sus dos últimos shows forzaron su voz y que se vio obligada a exigirse “mucho más de lo normal”.
“Estoy siendo tratada con muchos esteroides y otras ayudas para mi voz. Consideré la posibilidad de actuar el sábado, pero creo que ni siquiera hubiese sido capaz de acabar y, la verdad, no querría derrumbarme y dejarlos tirados de esa manera”, explicó.