Se trata de los liberales Rubén Moisés Galeano, Daniel Aquino, Luis Osvaldo Sánchez y Brian Esteban Martínez, todos imputados, quienes se presentarán -según anticiparon- este jueves, entre las 09.00 y las 10.00, ante el juez penal de Garantías, Gustavo Amarilla Arnica.
En contacto con Última Hora, una de las abogadas representantes, Liliana Boccia, explicó que la prioridad de los defensores es que los jóvenes vuelvan al país para someterse a la Justicia. Los mismos vendrán en un vuelo privado, a bordo del avión del político liberal Alfredo Jaeggli.
La profesional del Derecho dijo que solicitarán al magistrado medidas alternativas a la prisión para los cuatro imputados en el caso de la supuesta fabricación de bombas molotov en el interior de la sede del PLRA entre la noche del 31 de marzo y la madrugada del 1 de abril de 2017.
Así mismo, aclaró que la vuelta de los jóvenes liberales se da en el marco de audios filtrados en los que se escucha un supuesto tráfico de influencias para acelerar imputaciones en la causa.
Audios filtrados
Una conversación filtrada entre Raúl Fernández Lippmann, ex secretario del ex presidente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, Óscar González Daher, y el abogado Carmelo Caballero, reveló una presunta injerencia de José Ortiz, gerente de la tabacalera del presidente Horacio Cartes, en los procesos del 31M. En el audio también se menciona al fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón.
Los investigados se encontraban refugiados en el Uruguay por lo que consideraban una persecución política en su contra. La jueza Penal del 20º turno de Montevideo, María Noel Odriozola Sandoval, había rechazado los pedidos de extradición contra los jóvenes realizados por la Justicia paraguaya e hizo lugar a su pedido de refugio.
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El 31 de marzo de 2017, a raíz de la intención de aprobar la reelección presidencial en el Congreso, hubo una manifestación en repudio por parte de la ciudadanía. Dentro de ese contexto, los manifestantes provocaron el incendio de la sede del Poder Legislativo.
El caos, a su vez, derivó en un ataque al PLRA por parte de la Policía Nacional y posteriormente en la muerte del dirigente liberal Rodrigo Quintana, a causa de un disparo de uno de los agentes del orden.