La fuerte devaluación del real brasileño frente al dólar americano hizo que a los compristas del vecino país les sea menos conveniente cruzar la frontera al lado paraguayo para realizar sus compras.
La llegada del virus en Paraguay, con los dos primeros casos confirmados, obligó al Gobierno a tomar ciertas medidas preventivas. El sábado, el Ejecutivo anunció que desde hoy se procederá a un cierre parcial de la frontera, con el fin de reducir el ingreso de personas que podrían estar contagiadas con el virus.
El empresario y titular de Fedecámaras, Antonio Santamaría, destacó las medidas tomadas por el Gobierno para tratar de contrarrestar la expansión del virus en nuestro país.
Afirmó que, sin dudas, el coronavirus fue uno de los factores que forzó aún más la depreciación del real frente al dólar, que a su vez, repercutió en la menor afluencia de compradores brasileños.
“Para la frontera, que es un negocio trasterritorial porque todo lo que importa lo vende prácticamente fuera de Paraguay, es un golpe comercial que va a resentir aún más el movimiento comercial ya resentido”, sostiene.
Sostenibilidad. Santamaría alertó que ante el actual escenario, la sostenibilidad de las empresas de frontera se encuentra comprometida debido a la menor venta.
“En estos momentos las empresas tendrán que reducir sus costos para seguir existiendo”, dijo.
Recomendó al Gobierno analizar la reducción de tasas arancelarias, y a los bancos privados pidió flexibilidad con las deudas, para de esa manera tratar de sostener los empleos generados por el comercio fronterizo.
A su vez, el empresario de frontera Said Taijen coincidió con Santamaría e indicó que actualmente el comercio en frontera está casi sin movimiento.
“El menor movimiento se agudizó cuando se detectaron los casos (de coronavirus) en Brasil, la gente dejó de viajar. Pero el comercio está muy resentido, no solo por el coronavirus, sino por la caída sostenida del real que ya se da desde hace tiempo”, aclaró.
Taijen manifestó su apoyo a las medidas tomadas por el Gobierno para frenar la propagación, mencionando que aceptan y respetarán todas las acciones que ayuden a combatir la peligrosa enfermedad.
“Gracias a Dios que en Paraguay aún no tenemos muchos casos”, puntualizó.