En el escrito que presentaron indican que esto servirá para poder separar de sus cargos a uniformados que no estén aptos para realizar su trabajo y que sean un peligro para la sociedad.
Ricardo Riquelme, padre del niño que quedó herido, afirmó que este pedido no es una mera crítica a la institución policial, sino que también buscan enaltecer el trabajo de los uniformados íntegros.
“Esta petición también ayudará a los buenos policías que con honestidad, responsabilidad y sacrificio arriesgan su integridad física por el bien común”, dice parte del escrito que fue presentado también en el Congreso.
SOLIDARIDAD. Ricardo Riquelme mencionó también que en su caso no recibió la ayuda económica que le habían prometido las autoridades.
Esto hizo que tenga que recurrir a la solidaridad de la ciudadanía para poder costear los gastos médicos de su pequeño hijo, que ya dejó el hospital, pero al que le queda aún un largo peregrinar por hospitales.
El hombre organizó una pollada el pasado domingo.
Al enterarse que en Capiatá, donde una familia fue aniquilada por otro agente policial, estaban planeando una actividad similar, el padre decidió sumarse a la causa.
“Nos fuimos a Capiatá porque queremos hacer una asociación con todos los que sufrimos este tipo de hechos”, declaró Riquelme, que hizo una donación de pollos para una actividad que organizan los vecinos para este domingo.