Explicó que la empresa de sus padres hacía negocios con Azucarera Iturbe y que los cheques fueron a parar en manos de Ramón, a través de los dueños de Azucarera Iturbe, quienes los utilizaron como garantía en uno de sus préstamos con Ramón.
Esos cheques fueron utilizados por el empresario luqueño para denunciar a la joven por supuesta estafa.
“Por ocho años no pude salir del país, no podía viajar, tenía que venir a firmar todos los meses en el Palacio y cada vez que nos detenía la Policía por algún control rutinario, me llevaban hasta la comisaría, porque le saltaba que era una supuesta estafadora”, contó, en medio del llanto.
La mujer contó que fue sobreseída recién este año en curso en esa causa, por pedido de la Fiscalía. “Aparentemente, era un caso fácil, porque teníamos todos los documentos a nuestro favor, pero la causa fue a parar en la Fiscalía de Luque y no se podía hacer nada”, lamentó.