27 oct. 2025

Una mirada abierta a las periferias existenciales

Una mirada de misericordia a las periferias sociales y existenciales. Esto lo podemos apreciar en la película Santificar lo profano dirigida por Agustín Núñez, quien recientemente ha cumplido cincuenta años de labor artística y docente.

El barrio Ricardo Brugada, conocido como la Chacarita, alberga a esta historia que muestra la dramática cotidianeidad de sus pobladores, con sus penas y alegrías. Pocas veces este tradicional barrio asunceno, que sufre el estigma de la discriminación de algunos sectores de la población, ha servido de locación para una película, entre ellas El Rata de América, protagonizada por Charles Aznouvour en los años 60, y más recientemente Los Buscadores, de Maneglia-Schembori.

El concepto de “periferias sociales y existenciales” ha sido acuñado por el papa Francisco, incluso antes de ser elegido. Lo hizo en un encuentro previo al cónclave en 2013 donde expresaba el deseo de una Iglesia “pobre para los pobres”, “en salida” y en la cual “quien toca la carne del pobre toca la carne de Cristo”.

Pero estos conceptos no serán comprendidos por aquellos en los que predomine una insensibilidad y falta de empatía frente a los “heridos por la vida”, así llamados por San Juan Pablo II al hablar de las víctimas de la marginación, la injusticia y la pobreza en el mundo.

Es posible que los indiferentes frente a estas realidades humanas y existenciales tengan dificultades para percibir la profundidad del planteo de esta película de Agustín Núñez. El deseo de bien, el escándalo, el desvío del camino, la pregunta, las dudas, la necesidad de perdón, se confunden en el filme.

En el caso de los cristianos, los mismos están llamados a santificar el mundo –como dice la película–, porque a la fe nada de lo humano le es ajeno. Y esto queda evidenciado en el mismo titulo de esta producción paraguaya, pues el desafío es llegar a estos puntos de crisis y mirar lo verdadero y esencial de la experiencia humana.

Es una invitación a descubrir esa mirada de misericordia hacia las periferias sociales y existenciales de las víctimas del dolor, la falta de sentido, del olvido de Dios.

Es de desear que esta película contribuya a que no pasemos de largo siendo indiferentes frente al sufrimiento humano, sino que podamos ser “rescatistas”, samaritanos frente a tanto dolor olvidado e ignorado en el mundo de hoy. Cabe felicitar que Santificar lo Profano sea exhibida en este ciclo de cine paraguayo propiciado por Telefuturo.