Con autocrítica extrema y sin esquivar el tema, Ángel Romero fue directo aceptando el mal partido de la Selección ante Chile y el peso que significa para los jugadores estar cerca de una nueva eliminación.
“Trataremos de dar vuelta la página. Fue una derrota dolorosa, lo sintió el grupo. Uno entra a la cancha con la intención de dejar todo, más por esta camiseta. Hay veces que el fútbol te regala alegrías, otras veces tristezas. Dejamos todo en cada partido, por ahí no se dan los resultados”, expresó Ángel, que con tono muy dolido siente que las oportunidades de clasificación se hacen escasas, aunque mandó de igual forma un mensaje más esperanzador.
“Vamos a seguir intentando, este grupo va a dejar todo para ir a un Mundial. Las Eliminatorias están muy parejas, por ahí nosotros pecamos en algunos partidos de local; Argentina y Brasil ya están clasificadas; es todo muy parejo, hay chances aún, este grupo va a seguir peleando hasta que haya chances”, remarcó una y otra vez el mellizo como un discurso repetitivo de varias eliminatorias atrás donde por un lado se hablaba de chances y de cálculos, pero los números no le dieron a Paraguay para clasificar a un Mundial.
Ante la consulta de su estado físico, al no tener club, Romero disparó: “No he sentido el desgaste; si se ganaba iban a tener otra perspectiva; después de esta derrota pueden decir que estoy falto de ritmo”. Sobre el grito de los aficionados (“que se vayan todos”) el futbolista respondió simplemente que tratarán de salir de esta.
