Hakan Yasinoglu, un hombre de 45 años, fue encontrado vivo en un edificio derruido en el barrio de Defne, en Antioquía y trasladado al hospital, informa la agencia turca Anadolu. En el mismo distrito habían sido salvados esta mañana a otros dos hombres, mientras que un chico de 12 años, de familia siria, fue liberado de un derrumbe en una zona cercana. Los tres habían pasado 261 horas, casi 11 días, entre los escombros.
Los dos sismos han provocado al menos 38.000 muertos en Turquía, según la última actualización de Ankara, aunque se estima que la cifra aún subirá mucho más y tal vez supere los 100.000, cuando se pase a la fase de retirada de escombros.
El vicepresidente del Gobierno turco, Fuat Oktay, ha informado esta misma tarde que todavía continúan las labores de búsqueda y rescate en 200 puntos.
Un total de 84.000 edificios están o bien derrumbados o tan gravemente dañados que deben demolerse de forma urgente, según afirmó ayer el ministro de Urbanismo Murat Kurum.
SIRIOS VUELVEN A CASA. Abbas Albakur espera en el puesto fronterizo de Cilvegözu. Este refugiado sirio, superviviente del sismo que arrasó el sur de Turquía, quiere ahora regresar a su país pese a la inestabilidad. Tras huir de la guerra, numerosas familias sirias que vivían en Turquía desde hace años vieron su vida destruida de nuevo por el sismo del 6 de febrero, que dejó más de 41.000 muertos entre los dos países.
Abbas Albakur, de 48 años, cuenta que la casa en donde vivía en la provincia de Kahramanmaras, cerca del epicentro del terremoto en Turquía, ha quedado completamente destruida. “En un minuto se derrumbó todo”, recuerda. “En Siria ha habido problemas desde hace 12 años. Pero ahora la mayor catástrofe está en Turquía”, dice mientras hace cola al aire libre con sus hijos y una gran cantidad de equipaje, con destino a la provincia siria de Idlib. Casi cuatro millones de sirios se instalaron en Turquía huyendo de una guerra civil que devastó el país a lo largo de 12 años y mató a casi 500.000 personas. Las 11 provincias turcas afectadas por la catástrofe del 6 de febrero acogen a 1,74 millones de migrantes, según la ONU.
aumentar ayuda. La Organización Mundial de la Salud (OMS) aumentó a 84,5 millones de dólares su petición internacional de ayuda financiera para atender a las víctimas de los terremotos del 6 de febrero en Turquía y Siria, casi el doble de lo solicitado hace una semana. El pasado fin de semana, durante su visita a Siria para supervisar las labores humanitarias, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, lanzó una petición inicial de ayuda de 43 millones de dólares. Tedros subrayó esta semana que muchos de los supervivientes, especialmente en Siria, carecen de los adecuados alojamientos y acceso a cuidados médicos, alimentos o agua potable.