En total, 35 casas fueron las afectadas por el fenómeno climático, diez de ellas derrumbadas totalmente, según datos aportados por el intendente del distrito, Patricio Ayala. Además, los fuertes vientos destecharon varias casas, tumbaron árboles y dañaron cultivos en las compañías Zanja Ruguá, Costa’i y Potrero Villalba.
El intendente local, Patricio Ayala, manifestó que la tormenta irrumpió en la madrugada con tal fuerza que causó destrozos por doquier. Agregó que fue una especie de tornado. El fenómeno tuvo corta duración, pero generó serios daños en viviendas, cultivos y derribó varias torres del tendido eléctrico de la ANDE.
SIN HERIDOS. Igualmente, Ayala destacó que afortunadamente ninguno de los pobladores resultó con lesiones.
Informó esto luego de hacer un relevamiento de la zona donde de las precarias casas fueron derrumbadas.
Los ocupantes del las otras viviendas solo sufrieron pérdidas de los enseres domésticos.
La Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) dispuso el envío de un camión con chapas, víveres, colchones y frazadas para asistir a los afectados por el temporal. Afortunadamente, el clima en la tarde de ayer comenzó a mejorar, lo cual ayudará a que la asistencia a los afectados se pueda llevar a cabo con prontitud y sin inconvenientes, resaltó el intendente local.
35
viviendas fueron afectadas por el fuerte temporal, de las cuales 10 quedaron destechadas y no hubo lesionados.