Sin duda alguna, este año sorprendió en todo sentido, y pese a la situación se lograron crear momentos felices que valen la pena celebrar y recordar. Uno de estos fue el cumpleaños de Valeria Domaniczky Matiauda quien el pasado 22 de abril cumplió 15 años.
En medio de la incertidumbre generada debido a la crisis pandémica, la madre de la jovencita, Ivette Matiauda se vio obligada a suspender la tan anhelada fiesta de 15 años de su única hija. 2020 con sorpresas Nadie está preparado para enfrentar una pandemia. En el mes de marzo todos los planes se vieron truncados cuando el Gobierno Nacional dispuso la suspensión de todas las actividades que implicaban aglomeración de personas, a fin de evitar la propagación del coronavirus. La serefiesta de Valeria estaba prevista realizarse el 17 de abril junto a sus primas, amigas y compañeras de colegio; Ivette ya tenía todo listo para ese gran día. Al decretarse la cuarentena total sus ilusiones se vinieron abajo. “Esos meses fueron los peores. Para marzo ya tenía todo organizado y muchísimas cosas señadas y pagadas, como toda organización de una fiesta. Hasta el vestido ya estaba todo confeccionado”, mencionó la madre de Valeria. En cuanto a los servicios adquiridos para el evento (Dj, decoración, diseñado de vestido, servicio de catering, fotografía, entre otros) habían pactado que culminadas las restricciones sanitarias volverían a retomar la organización del evento. “En noviembre me reuní de vuelta con todos y me dijeron que para el jueves 26 de ese mes tenían libre”. Pero una semana antes se habían dado cuenta que para esa fecha había pronóstico de lluvia. “Entonces decidimos adelantar e hicimos la fiesta y la misa el lunes 23 de noviembre”, comenta. Un festejo íntimo Ante la situación y con las restricciones más flexibles para la realización del evento, Ivette organizó la fiesta en un tiempo récord de una semana. “Gracias a Dios salió como lo planeamos. Lo único que tuve que reducir muchísimo el número de adultos y de jóvenes, de lo que teníamos previsto invitar al principio”, comentó. En cumplimiento de las medidas correspondientes, Valeria acompañada de sus padres, –Marco Domaniczky e Ivette Matiauda– pudo celebrar su tan esperada fiesta; un divertido encuentro, al aire libre en el patio de su casa, donde luego de varios meses en los que transcurrió la cuarentena sanitaria, volvió a encontrarse con sus amigos. Inicialmente la misa de acción de gracias iba a tener lugar en la iglesia Oblatos de María, pero decidieron realizar también la ceremonia en su residencia. “El sacerdote vino a mi casa el día de la serefiesta e hicimos en la ceremonia, una bendición hermosa con el coro de Chiara Bellucci”, mencionó emocionada la madre. detalles del evento La noche fue memorable para la agasajada y los suyos. Todo quedó retratado en las fotografías tomadas por Julio Zárate. La ambientación fue al estilo rústico chic por Griselda D’Oliveira Bedoya. En la noche se sirvió un bufé preparado por Talleyrand para los adultos y un menú para jóvenes de Lucas Casado. La mesa de dulces incluyó postres de Kani Martínez, María Adalia Martínez, Lucy Brigadeiros, Larissa Fustagno, Tortas de Tía Laura y Tea Time Bakery.
Valeria cumplió 15 en abril y su fiesta fue postergada a consecuencia de la pandemia. Recién en noviembre hizo posible su sueño de festejarlo.