Además 13 refugiados desembarcaron en Samos, 10 en Rodas, dos en Leros y uno en Quíos, lo que aumenta a 13.700 el número de migrantes en los centros de acogida de los territorios insulares, mientras que son solamente 7.450 las plazas disponibles.
En la isla de Lesbos, donde hay 5.777 refugiados por 3.500 plazas, los incidentes de la madrugada del lunes al martes, cuando un gran incendio calcinó gran parte del campo de Moria dejando a centenares de personas sin techo, fue reflejo de la tensión que se vive en dichos campos, fundamentalmente por la incertidumbre sobre su futuro que tienen los migrantes.
En el otro lado están los habitantes locales, que temen que la situación se perpetúe y los migrantes terminen por no ser trasladados a territorio continental.
El alcalde de Lesbos, Spyros Galenós, expresó ayer a Efe que grupos de ultraderechistas intentan provocar una explosión de violencia por motivos políticos aprovechando que la isla griega es escenario desde hace días de enfrentamientos entre refugiados.
No obstante la mecha que encendió la oleada de protestas de los habitantes de Lesbos de los últimos días - marcadas por las acciones violentas de un grupo de militantes del Amanecer Dorado en la capital isleña, Mitilene, donde agredieron a una activista - fue el rumor de que el Gobierno preparaba un tercer centro para refugiados que se uniría a Moria y a Kará Tepé.
Según datos oficiales facilitados por el Gobierno, en Grecia hay 60.539 refugiados.
